500 años de la Reforma «hay libertad» en Stuttgart

Los días 23 y 24 de septiembre de 2017, la iglesia regional protestante celebró en la Schlossplatz de Stuttgart los 500 años de la Reforma bajo el lema "...hay libertad". Durante dos días se ofreció un atractivo programa con numerosas actividades y oficios religiosos con mucha música y un festival ecuménico.

El coreógrafo y bailarín canadiense Eric Gauthier animó a los asistentes al servicio ecuménico y puso a todos en movimiento, seguido del Ministro Presidente de Baden-Württemberg, Winfried Kretschmann, que pronunció un discurso como orador invitado.
Laith-Al Deen cerró la primera jornada con un concierto nocturno a una temperatura agradable. El programa, dirigido principalmente a los jóvenes, continuó el domingo con un DJ bajo un sol espléndido. Siguió una gala con Bishop July y los pasos de baile de Eric Gauthier. El gran final con todos los artistas culminó con la actuación del grupo Glasperlenspiel.

El gran escenario se instaló frente al Nuevo Palacio de Stuttgart, con vistas al imponente Königsbau. Berthold Blocher y su equipo de PML Veranstaltungstechnik proporcionaron al evento un convincente sistema de sonido de TWAUDiO. La dificultad de la zona a sonorizar residía en la anchura de la zona del público, que tenía 96 metros de ancho y 50 metros de largo. En la parte trasera de la Schlossplatz había otros dos escenarios más pequeños y diversas zonas de actividades cuyo programa no debía verse afectado por el sonido del escenario principal.

Una situación nada habitual para los técnicos de PML Veranstaltungstechnik. El sistema TWAUDiO completo constaba de 24 elementos VERA36, 24 elementos VERA20 como nearfill y ocho T20 como frontfill. 12 BSX proporcionaron suficiente presión en la gama de graves con ocho S33. Se utilizaron dos altavoces T24N como relleno de escenario y dos altavoces B18 como relleno de batería. Para la monitorización, se colocaron 12 monitores C15 en el escenario. Para conseguir una linealidad de fase exacta, todo el sistema se calibró con el software SMAART de Berthold Blocher. Debido a las numerosas actividades en los escenarios laterales, no fue posible realizar una prueba de sonido en el escenario principal, por lo que el sistema tuvo que estar perfectamente ajustado de antemano para las transmisiones musicales y, especialmente, para las de voz. Un evento exitoso con un sistema de sonido que cumplió con creces todos los requisitos de sonido.